Qué son los servidores DNS

Seguro que, entre la gran oferta online que se encuentra hoy en día, en algún momento se ha cruzado con estos servidores DNS. ¿Sabe realmente qué son y para qué son útiles? Vamos a conocerlos un poco mejor. 

Los servidores DNS

Siempre que un usuario quiere acceder a una web online, tiene que localizar una dirección IP que se aloja en un servidor. Lo normal es que dicho internauta únicamente conozca el nombre del dominio, no más información. Es decir, son esas series numéricas con puntos tipo 93.183.215.33, por ejemplo. 

Estas direcciones, no obstante, son traducidas a nombres fácilmente recordables. Por eso, cuando busca una dirección, no introduce estos complejos números. Más bien tiene que acordarse del dominio, por ejemplo, el de esta misma web en la que está ahora. 

Así pues, lo que se busca es que, durante este proceso, las máquinas puedan traducir los nombres de dominio en direcciones numéricas comprensibles para ellas y, a su vez, más entendibles para los humanos en un primer momento. Y eso se realiza por medio del DNS o Domain Name System que, traducido al castellano, quiere decir Sistema de Nombres de Dominio. 

Por lo tanto, el DNS en sí es el administrador de espacio de nombres de dominio, o sea, el que resuelve las peticiones cuando se asignan nombres. Es decir, acude a una especie de red global de servidores que subdividen el espacio según zonas administradas de forma independiente, logrando una gestión descentralizada. 

En el momento en que un usuario registra un dominio, se crea lo que se conoce como entrada WHOIS. Dicha entrada va al registro correspondiente, de manera que queda almacenada en el DNS en forma de resource record. Así pues, la base de datos de dicho servidor se transforma en un compilador de registros de la zona de espacios de los nombres de los dominios que son gestionados desde ahí. 

Así es como se procede desde 1983, cuando se creó el sistema de nombres de dominio que vino a sustituir al anterior procedimiento que, básicamente, daba muchos errores y se basaba en archivos locales de hosts. 

Peticiones

Al introducir la dirección de una web, o sea, una URL, se realiza una petición que se ha de resolver. Este es un componente clave de un sistema operativo, que va a almacenar en el caché las direcciones IP solicitadas. 

A continuación, de todas estas peticiones solicitadas, si alguna de ellas no se encuentra en el caché, va a ser redirigida al servidor DNS correspondiente, o sea, por lo general, del proveedor de internet que tenga cada usuario. 

Si está disponible una vez cotejada la petición, la base de datos envía la respuesta con la dirección IP correspondiente. A continuación, el navegador del usuario se dirige al servidor web que se desea y lo abre por medio de internet. Ahora bien, también se puede dar el camino inverso: es decir, la traducción de la dirección IP en la dirección de dominio. Sea como fuere, para el usuario el resultado es idéntico. 

Es decir, estos servidores realizan dos tipos de resoluciones diferentes: 

  • Resolución recursiva: el servidor DNS no puede responder solo, por lo que toma información de otro servidor.
  • Resolución iterativa: el servidor resuelve la petición y envía la información al siguiente servidor DNS según la jerarquía establecida.

Ya sabe a grandes rasgos qué son los servidores DNS y cómo trabajan. Si desea más información o todavía alberga dudas sobre los servidores DNS, no pierda tiempo y póngase en contacto con nuestros expertos para que le ayuden de forma personalizada.